Un estudio reciente de la Universidad de Columbia Británica y FPInnovations determina que existe una relación entre la madera y la salud humana. Este estudio demuestra que la presencia de superficies de madera en un habitación hizo disminuir la actividad del sistema nervioso simpático, responsable de las respuestas al estrés en las personas. Esto supone un gran avance en el hábitat y el uso de madera en nuestro entorno. 

Desde el punto de vista científico ya se ha demostrado que el contacto con la naturaleza reduce en los humanos la presión sanguínea, el ritmo cardíaco y la agresividad, a su vez, aumenta la capacidad de concentración, de centrar la atención y realización de tareas creativas. De hecho, un estudio realizado sobre pacientes en recuperación de una operación abdominal, demuestra que los pacientes con vistas a la naturaleza tenían recuperaciones más rápidas y que requerían menos analgésicos.

Los beneficios de la naturaleza en nuestra salud son claras sin embargo, en nuestro día a día donde pasamos tan poco tiempo en contacto con la naturaleza y exteriores, la solución pasa por acercarnos más a la naturaleza o acercar parte de la naturaleza a nuestras viviendas, como puede ser utilizando madera.

En el estudio se crearon diferentes entornos de oficina para estudiar los efectos de materiales naturales en el sistema nervioso. Se dispusieron muebles idénticos, en una oficina de color blanco y otra oficina con muebles acabados en madera. Durante las pruebas, se dijo a las personas que iban a participar en el desempeño de una tarea, no se les informó la finalidad real del estudio de análisis de los efectos de los materiales. Durante el experimento se medía el ritmo cardíaco y la conductancia de la piel de las personas que hacían la prueba.

Como resultado, se vio que el estrés según la activación del sistema nervioso simpático fue menor en las personas que se encontraban en la habitación con madera durante todas las fases del estudio. Las personas en la habitación con madera tenían menos pensamientos estresantes o alarmantes.

En definitiva, la presencia de madera en interiores reduce la activación del Sistema nervioso simpático y por lo tanto el nivel de estrés; la presión sanguínea y el ritmo cardíaco. También inhibe las funciones de digestión, recuperación y reparación del organismo para afrontar las amenazas inmediatas. Por lo tanto, el uso de la madera crea un entorno más sano para la salud.